Cuéntame un cuento…

«Pintaré mi mundo de colores nuevos, 

hoy me voy contigo a escribirte un cuento, 

hecho sin palabras, hecho con tus sueños»

(Hecho con tus sueños de Efecto pasillo)

Hola!!! Cuánto tiempo, ¿eh?

La verdad es que, si he tardado tanto en volver, sólo ha sido por un motivo… NO TENÍA IDEAS NUEVAS PARA HACER MANUALIDADES!!!

El fieltro ya lo tenía trilladisimo y no se me ocurría qué hacer que fuera útil. Tampoco necesitaba más cuadros para casa y los que me han encargado aún sigo esperando que decidan qué quieren que les pinte o que compren los tableros, así que estoy en las mismas…

El caso es que en esta ocasión os traigo un regalo que le hice a una amiga la semana pasada y, aunque no es una petit deco, sí es una manualidad y por eso os la traigo.

Este regalo, tiene bastante que ver con la canción del inicio del post, ya que se trata de un cuento. Un cuento lleno de colores, basado en su vida y con el que le deseo que todos sus sueños se hagan realidad. Ni qué decir tiene que está hecho con todo mi cariño y el del resto de sus amigas que participaron ayudándome en su elaboración, aportándome historias y fotos que hicieron que el cuento fuese todo un éxito.

En noviembre del año pasado, ésta amiga se encontraba de viaje con su novio cuando nos envió un whatsapp con una foto de su mano con un anillo. Todas las que lo recibimos enloquecimos de felicidad ante la noticia que nos estaba transmitiendo y, sin saber muy por qué, en aquél momento lo primero que yo hice fue hacer una captura de pantalla de aquél mensaje, ya que sabía que más tarde o más temprano. lo acabaría usando.

Meses más tarde todas sus amigas nos pusimos manos a la obra con la despedida y, aunque fue bastante difícil ponerse de acuerdo en qué hacerle, dónde llevarla, cuándo sería y demás, lo que sí tuvimos claro es que había que prepararle algo que conservase para siempre y que, cada vez que lo viese, se acordase de nosotras.

Propuse la idea de meterle en una caja, cosas que necesitaría para esa nueva etapa que dentro de poco comenzará y, como a todas les encantó, nos pusimos a ello…

caja

La caja la llenamos de pequeñas cosas, envueltas y numeradas una a una, con una guia en la que se explicaba el motivo por el cual habíamos decidido meter esa cosita en su caja: una vela que avivase su amor, un marco de fotos para la foto que nos haremos todas con ella el día de su boda, un matamoscas para adueñarse del mando, un calendario para anotar todas las fechas importantes, la liga que llevará el día de su casamiento…

caja abierta

Y os estaréis preguntando, ¿qué tiene que ver todo esto con un cuento? Pues la respuesta es muy sencilla. De todos esos detallitos que le metimos en la caja, el último, el número 16, era el cuento.

cuento

En un principio pensé en hacérselo tipo presentación power point, pero como lo que queríamos era verlo con ella y que lo pudiera disfrutar siempre que quisiese, descartamos esa idea para buscar otra más tangible, más cuento de verdad y, dado que el tiempo se nos echaba encima, la solución más fácil y más original era hacérselo yo misma.

Compré un álbum de fotos, imprimí las fotos que me habían mandado un par de amigas suyas, las que me envió el novio (también compinchado en todo este jaleo) y, por supuesto, la captura de pantalla de su mano con el anillo, compré cartulinas de colores, que luego corté del mismo tamaño que las fotos y en las que escribí fase por fase el cuento de su vida.

Cuando haces algo así, siempre te queda el miedo de que le guste por lo menos tanto como la ilusión que tú has puesto en hacerlo y, la verdad, es que, en este caso, superó todas mis expectativas. El cuento fue un éxito. Encantó a sus amigas cuando les mandé la prueba final, al novio, a la madre de la novia pero, sobre todo y lo más importante, es que ella está encantada con él.

abriendo cuento

Creo que está claro, que si haces las cosas con cariño y eres capaz de transmitirlo, el resultado siempre será positivo y sólo ver su cara de emoción al abrirlo hizo que las dudas que se me podían haber planteado desaparecieran de un plumazo y me sintiera muy satisfecha del trabajo bien hecho.

leyendo

Como sé que ella leerá éste post, me vais a permitir que desde aquí, una vez más, vuelva a agradecerle su amistad incondicional y desearle todo lo mejor, que sé que está por llegar y que se lo merece con creces.

Y para acabar, anunciaros que en próximos post, os enseñaré mis nuevas creaciones, ésta vez con trapillo…

Nos seguimos leyendo 😉